martes, marzo 31, 2015

Rafecas, el cineasta subsidiado y ofendido



El director de cine, Diego Rafecas, descargo ayer su ira contra quien suscribe a través de su cuenta de Facebook por haber tuiteado sobre los subsidios que reciben sus películas del INCAA, un organismo sospechado de corrupción, y el comportamiento de su hermano de su hermano el juez federal. Lo concreto es que el cineasta quiere ocultar con su intolerancia la denuncia presentada el año pasado en el Consejo de la Magistratura contra el magistrado federal por favorecer a empresas, entre ellas la de su hermano, beneficiadas con importantes sumas de dineros públicos. No cabe duda por lo que escribe el hombre de cine de su simpatía con el kirchnerismo y reacciona como tal, agrediendo y victimizandose. Pero las dudas existen. El año pasado Perfil anticipaba esa información:


 El Consejo de la Magistratura, encargado de elegir y controlar a los jueces, impulsa una nueva causa contra el juez federal Daniel Rafecas sobre supuesto mal desempeño. Se trata de una investigación en la que el magistrado sobreseyó por el delito de malversación de fondos públicos a ex funcionarios del Incaa. En la causa eran investigados socios comerciales de un socio de su hermano, el cineasta Diego Rafecas. El cineasta fue beneficado con millonarios créditos. La denuncia fue iniciada en marzo por el senador radical Mario Cimadevilla, quien enfrenta al juez Rafecas por haber enviado a juicio al ex presidente Fernando de la Rúa por el caso de las coimas en el Senado. Cimadevilla es senador por la UCR, como el ex mandatario. El consejero detalló en su denuncia los nexos entre los imputados y el hermano del juez, y lo acusa de “no haberse excusado”, “no haber ahondado en la investigación”, de “falta de parcialidad e independencia”. Allegados al juez Rafecas explican que no hubo pruebas que demostraran los delitos y que en el juzgado se obró de acuerdo con la ley. Causas y nexos. En el juzgado de Rafecas se investigaba la presunta malversación de fondos a cargo del ex vicepresidente del Incaa Jorge Armando Alvarez, desde febrero de 2006 hasta abril de 2008, que habría otorgado créditos “direccionados”. La empresa Lacsa, integrada por Oscar Azar y Fernando Huberman, se benefició con el otorgamiento de un crédito por $ 600 mil y una posterior ampliación de $ 1.500.000 para la creación y equipamiento de un laboratorio de post producción que se emplazaría en la Ciudad de Buenos Aires. La denuncia ante la Magistratura dice que Azar, socio de Lacsa, también es accionista de otra empresa, Daltel SA, vinculada a Fernando Sokolowicz, socio comercial de Diego Rafecas y accionista de Página/12. Alvarez a su vez, otorgó a la empresa Zanen Producciones SA, de Rafecas, una serie de subsidios y créditos del Incaa que le permitió realizar varias películas entre 2008 y 2013. Cimadevilla dice que el hermano del juez recibió del Incaa subsidios y créditos que ascienden a más de $ 9 millones. Fernando Huberman, Oscar Azar y Jorge Armando Alvarez, involucrados en el supuesto desvío de fondos del Incaa, fueron sobreseídos por el juez Rafecas. 


Además el colega Ignacio Fidanza publicaba en su sitio www.lapoliticaonline.com el 25 de febrero más información comprometedora contra los hermanos Rafecas y el fallo express que desestimó la denuncia por encubrimiento del fiscal muerto Alberto Nisman:



 La Casa Rosada ubicó al tope de sus variados focos de atención al juez federal Daniel Rafecas, quien quedó a cargo de la investigación contra la presidenta Cristina Kirchner y otros destacados miembros del kirchnerismo por el supuesto encubrimiento de la participación de Irán en el atentado a la AMIA, denunciado por el fiscal Alberto Nisman antes de su muerte. En esta causa ya están imputados la Presidenta; el líder de La Cámpora, Andrés "Cuervo" Larroque; el canciller Héctor Timerman; el piquetero Luis D'Elía; el líder de Quebracho Fernando Esteche; el ex juez Héctor Yrimia; y el agente de inteligencia Allan Bogado. Aunque D'Elia podría recusar al magistrado por declaraciones que habría formulado en su contra, esa cuestión deberá ser revisada por la Cámara Federal. Esta semana, Rafecas deberá analizar si avala las 45 medidas de pruebas solicitadas por el fiscal Gerardo Pollicita, que lo secunda en la investigación. Sin embargo, fuentes al tanto de la evolución de la causa anticiparon a LPO que Rafecas planea delegar la investigación en Pollicita para sacarse de encima la presión política. No se trata necesariamente de una buena noticia para la Casa Rosada, este fiscal ya imputó a la Presidenta. Sin embargo, será el juez el que tomará cada resolución en contra o a favor de la Presidenta y el gobierno se siente seguro por los nexos que mantiene con Rafecas, agregaron las fuentes consultadas por LPO. Los vínculos Rafecas accedió al fuero federal a propuesta de Néstor Kirchner y desde entonces fue bastante leal a las necesidades del Gobierno, aunque en el caso Ciccone su decisión de habilitar el allanamiento del domicilio del vicepresidente Amado Boudou motivó su deplazamiento de la causa, luego lamentado por el kirchnerismo más racional. Pero más allá de ese incidente, Rafecas mantiene congeladas causas sensibles para el Gobierno como la investigación por enriquecimiento ilícito contra el jefe del Ejército, César Milani. Las denuncias que penden sobre su cabeza en el Consejo de la Magistratura –donde el radicalismo votaría con entusiasmo su destitución- lo han convertido en una suerte de rehén del oficialismo. La relación de Rafecas con el kirchnerismo excede el ámbito judicial. Su hermano Diego fue beneficiado con los subsidios que el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) distribuye de manera arbitraria. Además, mantiene una estrecha relación con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. De hecho, en una de las empresas de Diego Rafecas, Zazen Producciones SA, aparece como socia María Cristina Capitanich. Esta firma recibió subsidios del Instituto del Cine del 2008 a la fecha. María Cristina Capitanich fue funcionaria del Instituto de Servicios Sociales del Chaco y en el 2012, en pleno escándalo por Caso Ciccone, Diego Rafecas filmó en el Chaco con el aval del actual jefe de Gabinete una película en la que se especuló con la participación del actor irlandés Pierce Brosnan. La película “Ley Primera”, se filmó en el Impenetrable chaqueño y fue dirigida por el cineasta con subsidios del Incaa. Este fue una de los motivos esgrimidos en marzo del año pasado por el senador radical Mario Cimadevilla, entonces consejero de la Magistratura, para impulsar una nueva denuncia contra el juez Rafecas, por haber sobreseído a funcionarios del Incaa en una acusación por malversación de fondos públicos. En la causa eran investigados socios comerciales de un socio de su hermano Diego y, pese a este evidente conflicto de interés, el juez federal no se excusó. En esa causa se investigaba subsidios otorgados por el ex vicepresidente del Incaa Jorge Armando Alvarez entre febrero de 2006 y abril de 2008. Se investigó el caso de la empresa Lacsa, integrada por Oscar Azar y Fernando Huberman, a quien el Incaa benefició con el otorgamiento de un crédito por $ 600 mil y una posterior ampliación de $ 1.500.000 para la creación y equipamiento de un laboratorio de post producción que se emplazaría en la Ciudad de Buenos Aires. La denuncia ante la Magistratura sostiene que Azar, socio de Lacsa, también es accionista de otra empresa, Daltel SA, vinculada a Fernando Sokolowicz, socio comercial de Diego Rafecas y accionista del diario kirchnerista Página/12. Álvarez y la entonces presidenta del INCAA y actual diputada nacional del Frente para la Victoria, Liliana Mazure, le otorgaron además a la empresa de Diego Rafecas, Zazen Producciones, subsidios y créditos por más de 14 millones de pesos, lo que le permitió filmar películas entre 2008 y 2013. Se analiza que el costo de las filmaciones habría sido inferior a los fondos gestionados y otorgados. Cuando la causa llegó a manos del juez Rafecas, en lugar de excusarse este decidió en un trámite express sobreseer a Fernando Huberman, Oscar Azar y Jorge Armando Alvarez. Azar ya acumula varias denuncias penales por supuesto desvíos de fondos junto a los últimos tres presidentes del Incaa, Jorge Coscia, Jorge Alvarez y Liliana Mazure. Mazure se encuentra imputada en esta investigación por supuestas negociaciones incompatibles con la función pública, pero en Comodoro Py creen que Rafecas no avanzará más allá de eso y “demorará” la investigación todo lo que pueda, ya que una investigación seria sobre la trama de corrupción en torno a los subsidios del Incaa llevaría directamente a la productora Zazen de su hermano Diego. Rafecas todavía mantiene otra causa vinculada a esta trama. Investiga por presunto desvíos de fondos a Mazure y al cineasta Pablo Rovito. Por su actuación en este expediente, el presidente de la Cámara Federal, Martín Irurzun, lo tuvo que reprender por la evidente “demora” en la que incurrió. Esta productora incluso aparece en otro expediente muy sensible para la Casa Rosada: el que investiga a la mano derecha de Carlos Zannini, el subsecretario Legal y Técnico, Carlos Liuzzi. LPO accedió en exclusiva a la documentación que detalla el circuito de trece llamadas que se realizaron entre el titular de la financiera Propyme, Guillermo Greppi, y el subsecretario Liuzzi, durante y después del allanamiento en el que policías a cargo del operativo le habrían solicitado dinero en nombre del juez federal Norberto Oyarbide para suspender el procedimiento. Dos números llamaron la atención de los investigadores. A las 13.05 de ese día Greppi llamó a dos celulares de Zazen Producciones.



 En fin, no se si será un buen director de cine, por las dudas me abstengo de opinar ya que Rafecas querello al colega Diego Papic por haber criticado uno de sus filmes. Este "imbecil" simplemente lo saluda y le aconseja que arregle las deprolijidades antes de insultar.

3 comentarios:

Ricardo Falabella dijo...

Beto, Siempre pasa lo mismo. vos lo ves caminando bamboleándose a los costados, las plumas son blancas y el pico redondeado. Se mete en el agua y nada con sus patas que tienen los dedos unidos por una membrana. Ellos dicen que se llama elefante pero en el barrio sabemos que es un pato.

Ricardo Falabella dijo...

Si queremos preguntarte en el blog otros temas, cómo se hace?

Beto Valdez dijo...

Gracias